¿Te suena esta palabra? Supongo que algunas la habréis escuchado alguna vez y sepáis un poco en qué consiste, pero para otras ¡puede sonar a chino! Por eso mismo hoy escribo esta entrada para despejar todas las dudas sobre este tratamiento tan popular en medicina estética.
¿Qué se inyecta?
La mesoterapia consiste en infiltrar con una aguja muy fina, manual o con pistola, en el tejido celular subcutáneo de la zona a tratar una mezcla de sustancias reafirmantes, lipolíticas (reductoras de la grasa), diuréticas o venotónicas. Se emplean productos homeopáticos y alopáticos.
¿Cómo se elimina la grasa?
Las sustancias que se aplican a través de estas microinyecciones disuelven las grasas de la zona tratada, y dicha grasa disuelta es transportada por la sangre hasta los riñones para que finalmente sea eliminada por la orina.
¿Es dolorosa?
Se trata de una técnica no dolorosa, que lo único que puede llegar a producir es cierta molestia, ya que los pequeños pinchazos se realizan muy superficialmente por debajo de la piel y se llevan a cabo con agujas muy cortas y extremadamente finas.
¿Por qué es tan conocido este tratamiento?
Para empezar, la mesoterapia se trata de un tratamiento simple y poco costoso en el que se utilizan productos muy seguros y en dosis mínimas. Esta técnica produce una combustión local de las grasas y mejora el contorno de las zonas tratadas, activa la circulación sanguínea y linfática, y mejora la oxigenación tisular. Se trata de un tratamiento con buenos resultados y escasos efectos secundarios.
¿En qué partes del cuerpo se puede utilizar?
La mesoterapia es recomendada para todas aquellas partes del cuerpo de las que se quiera eliminar la grasa, desde el abdomen, los muslos, los glúteos y los brazos. Y también para el rejuvenecimiento del escote y el rostro, conocido este último como mesoterapia facial o mesolift.
¿Te quedan más preguntas sobre la mesoterapia? Yo te cuento todo lo que quieras saber.