Retensado Cutáneo

¿Qué es el retensado cutáneo?

Está indicado para la regeneración y tensado de las estructuras internas de la piel.

Consiste en infiltrar, con unas finas cánulas que minimizan las molestias y la aparición de hematomas, precursores biológicos (Radiesse, etc.), siguiendo vectores de fuerzas en la dermis profunda; y estimular la formación de colágeno en puntos de anclaje. Podemos utilizarlos para reafirmar el óvalo facial y para tersar zonas corporales (brazos, cara interna de los muslos, abdomen, glúteo, etc...). Mejora el aspecto de las zonas envejecidas de la piel. El producto no actúa como un relleno, sino que tiene un efecto tensor sobre la piel.

Se emplea anestesia tópica y frío local. Es necesario realizar un diseño y marcado individualizado de las zonas a tratar en cada paciente. La aplicación de los productos se realiza con agujas de pequeño calibre. Actuamos sobre dermis, tejido celular subcutáneo y plano muscular para tensar la piel y redefinir volúmenes. Construimos columnas tensionales químicas que elevan las estructuras faciales y corporales, disminuyendo la flacidez y el descolgamiento.

El resultado

El resultado se aprecia, en ocasiones, de forma inmediata. Para mantener el resultado un año es preciso una segunda sesión a las cuatro o seis semanas.

Debe personalizarse el tratamiento según la edad, características de la piel, etc. En general se realizan dos sesiones, separadas unas cuatro o seis semanas. La duración del efecto suele ser de nueve meses a un año.

Es recomendable repetir el tratamiento dos veces al año, dependiendo de cada paciente a los seis o nueve meses después del primer tratamiento para no perder totalmente el efecto inicial.

Recomendaciones

Se recomienda combinar con otras técnicas de rejuvenecimiento facial para prevenir el envejecimiento de la piel.

Tras la infiltración pueden aparecer hematomas que debemos tratar con cremas específicas y que pueden ocultarse con maquillaje. Suele inflamarse ligeramente la zona y presentar discretas molestias y/o dolor al palpar las zonas infiltradas los días siguientes al tratamiento. Es posible, en pocas ocasiones, notar durante unos días zonas de la piel engrosada, unos pequeños bultitos, que desaparecen en unos días. A los 15 días puede aparecer picor en la zona, que suele desaparecer en un par de días.

Contraindicaciones

Contraindicado en pacientes que presentan alguna infección en la piel, alergias, problemas de coagulación, enfermedades autoinmunes, colagenosis o atopias cutáneas.

Las pacientes con “pánico” a las agujas es recomendable que realicen otros tratamientos alternativos.

No recomendamos realizar ningún tratamiento en pacientes embarazadas o en periodo de lactancia.